
LOS LADOS DEL BATUQUE
Para el adepto al culto de Batuque, existen cinco "lados" de su religión, que son ciertamente "modalidades de culto" originadas dentro de las tribus o "naciones" predominantes. Cada casa se atribuye por lo general dos de estos "lados" o "naciones" (también se le llama "Nación" al culto, como para diferenciarlo de "la Religión" que engloba además a otros cultos afrobrasileños, tales como Umbanda (o "caboclos") y Quimbanda (0 Línea Cruzada -cruzada con el Batuque), por ejemplo jeje-oyo, jeje- ijesha, jeje-cabinda, etc.
Las diferencias entre los "lados" o "naciones" están circunscriptas a: -
-Ritmo del tambor (toque)
-Uso o no de algunos àshé cantados (rezos en lengua yorubá)
-Orden de sucesión de los orisha (este orden jerárquico se llama sirè en el Candomblé, en el Batuque no tiene un nombre específico)
-Numeración Mágica ("cuenta" de santo. Nótese que es frecuente llamar al orisha "santo", notorio ejemplo de asimilación cultural con la Iglesia Católica. No obstante hay actualmente una tendencia muy marcada de devolver el préstamo y llamar al orisha simplemente orisha)
De todos los "lados" quienes llevan un ritmo más rápido, picado y festivo, son indudablemente los jeje. Las otras "naciones" cantan en ritmos más lentos, solemnes y acompasados. Esto hace que los festejos, que suelen ser largos, incorporen àshé de jeje para matizar, logrando cada tanto retomar la atención de los presentes. En teoría la casa toca su ritmo propio para los orisha hechos allí, y luego saludaría o llamaría a los de otras modalidades de culto que estuviesen esperando dicha gentileza. En la práctica, como anotamos, es un modo de lograr animación cuando la fiesta está volviéndose demasiado lenta, pues hay que tener siempre presente que los orisha adoran danzar. Los "lados" o "naciones", en orden de menor a mayor número de adherentes, tanto en Porto Alegre como en Uruguay, donde el Batuque crece día a día como manifestación religiosa, se denominan así.
1) JEJE (muchos adeptos dicen jejo)
Es de origen dahomeyano (actual República de Benin). Vivaz y alegre, se hace absolutamente imposible encontrarlo como ritmo puro, aún en Porto Alegre. Siempre está presente aunque asociado a otros toques tribales. Se ejecuta con varetas de madera de cipó llamadas oguidavi y se danza enfrentados en la roda, varones y mujeres (los orisha, no sus hijos) en pasos rápidos y cortos con giros que recuerdan la coreografía del gato rioplatense. Montevideo carece de casas donde se toque jeje "a lo jeje", aunque el pasado año se mostró en público esta modalidad de danza en un encuentro propiciado por el babalorisha Armando de Oshala (Armando Ayala), cuyo iniciador, Joáo de Bara (Joáo C. Lima) aún tocaba este ritmo en la década de los 60. La última casa netamente jeje de todo el estado de Río Grande do Sul está en Viamão, el ilé de Voltér de Ogún (Voltér C. da Rocha). Este tipo de toque exige que el ejecutante del tambor sostenga entre sus piernas el instrumento, mientras que para otros ritmos éste es usado generalmente acostado sobre sus rodillas. Otra particularidad consiste en el uso del agogó para acompañar el ritmo, además del tradicional chequeré o ajé. El agogó es un par de campánulas de hierro sin badajo unidas por una varilla del mismo metal en forma de "U" con uno de los lados más prolongado. Se golpea con una vareta de cipó. Las demás naciones sustituyeron el tradicional agogó africano por campanillas comunes llamadas genéricamente "sinetas". Su cometido, además de marcar el compás, es urgir la llegada del orisha en su iniciado. Bien que como modalidad religiosa pura está casi completamente extinta, la nación jeje subsiste en los nombres de sus divinidades (VODUN) que son evocadas en los ashé cantados: LEGBA (orisha Bara), AVAGAN (orisha Ogun), LEPON (orisha Shapaná), SAKPATA (orisha Shapaná), BADÉ, SOGBO (orisha Shangò), AVEREKETE (orisha Naná). Señalemos entre los aportes básicos de esta etnia, la introducción al culto de Batuque de tres vodun de alta significación: BARA, SHAPANÁ, y NANÁ, esta última su máxima divinidad, asociada a la creación y al orden cósmico
2) NAGÓ -Esta palabra designa genéricamente a todos los yorubás: OYO, IJESA, OFA, ILOBU, IJEBU, REMO, KETU.
2) NAGÓ -Esta palabra designa genéricamente a todos los yorubás: OYO, IJESA, OFA, ILOBU, IJEBU, REMO, KETU.
También este toque en estado puro es prácticamente inexistente, aunque relevamientos efectuados entre 1970 y 1981 en Rio Grande encontraron dos casas autodefinidas como "nagó" a secas, la de Miro de Ogùn (Olmiro Camargo de Deus), y la de Alzenda da Oyá (Alzenda Meneses}. Es un ritmo sincopado, lento, majestuoso y grave, de tonos bajos. Difiere de otros lados más que en el orden de sucesión de los cantos, en el detalle de asentar el Balé, (lgbàle en yorubá) la casa donde se cultúa a los miembros difuntos del grupo en la parte del frente del templo religioso y no en los fondos como lo hacen habitualmente los demás lados, cerca de Legba, el Bara-eshu de la calle del dueño de casa.
3) CABINDA -
Cinco o seis casas-madre reinvindican para sí en Porto Alegre el distintivo de ser de nación cabinda, aunque sus seguidores suelen pronunciar "cambina". Se considera al babalorisha Gululu como introductor de esta modalidad ritual, siendo sucedido por Valdemar de Shango Kamucá, el verdadero fundador del lado, quien fijara definitivamente el corpus de creencias y prácticas (Valdemar Antonio dos Santos). Dice la tradición que Valdemar traducía a Gululu, cuyo portugués parece haber sido ininteligible. Las órdenes y fundamentos del africano eran re interpretadas por su ayudante, hombre dotado de gran capacidad organizativa y singular don de síntesis. Es probable que hubiera adaptado a la realidad gaúcha un sinnúmero de detalles que produjeron una flexibilidad y simplificación de criterios que subsisten hasta hoy. Con respecto a otros lados, una característica notoria es el número atribuido a los orisha: 5 para Ogùn (7 en las demás naciones), 11 para Ode (7), 9 para lemanja-(8 normalmente). Colocan raramente buzios (cowries) al lado de los òkutá, y juegan sólo ocho mientras que usualmente se utilizan dieciséis más los testigos (okueo). Siendo sumamente parcos en sus obligaciones, en cantidad y tamaño, ponen escasas quartinhas (botellas de barro para el agua), y siempre tapadas, sólo las abren en ocasión de algunos rituales, y no lascan a propósito (como los jeje) la boca de la que corresponde a Bara. La sucesora de Valdemar fue Madalena de Oshum Epanda (Maria Madalena Aurélio da Silva) iniciadora del recientemente fallecido Romário de Oshala Onifá (Romário Almeida), considerado en vida como el más fiel y puntilloso portavoz de Cabinda. Hija espiritual del finado Romário en Montevideo, con casa abierta y todos los áshé es la iyalorisha Milka de Oshum Epanda (Milka Pérez), establecida en el barrio Conciliación. El Legba de Cabinda se entroniza en un agujero en tierra, al que se alimenta de cuatro en cuatro años, o de siete en siete años, según la casa. Entre obligación y obligación permanece tapado en su pozo, señalado la más de las veces por un candelero de barro.
4) OYO
El lado o nación de oyo es uno de los más seguidos por la comunidad del Batuque, sólo superado en número por el culto de modalidad ijesha, llamado popularmente jeshá. Su particularidad estriba en el orden sucesional de los cánticos, invocando en primer término a los orisha varones en esta secuencia:
1) BARA
2) OGUN
3) SHAPANÁ
4) ODE
5) OSSA
6) ORUMlLÁ
7) BOKUN (ambos Oshala)
8) SHANGÒ (OGODO, AGANJU, IBEIJI)
Shangó va último de los varones por haber sido rey de Oyo, de manera que es el supremo antepasado tribal.
Las orisha mujeres siguen este orden:
1) IEMANJA
2) OBA
3) OTIN
4) NANÁ
5) OSHUM (EPANDA, ADEMUN, OGUEDA o ADOKO, es decir, de niña a anciana)
6) OYA o IANSÃ
7) OSHALA (viejo)
Llama la atención que lansã sea la orisha que precede a Oshala, y tal vez pueda resultar extraño que Oshala, considerado el patriarca yorubá, sea invocado con las mujeres, al tiempo que otros aspectos (jóvenes) del mismo orisha aparecían junto a los varones. La primera cuestión se explica recordando que lansã era la concubina real de Shangó como Alááfin de Oyo, al cesar Oba en sus funciones por engaños de alcoba y cocina. lansã, que la engañara provocando una mutilación innecesaria y la pérdida de su situación de íyalodé ( esposa principal), al ser repudiada Oba por su marido, ocupa su lugar de preeminencia como reina de Oyo y antecede pues al orisha padre. La segunda cuestión es explicada también por los mitos sagrados: por haber tratado de engañar a Naná y quitarle el dominio del reino de la muerte (que pasó a manos de lansã), vistiéndose de mujer, el más anciano de los orisha se ve obligado a vestir como una mujer para siempre, y a comer, como ellas y con ellas, animales de sexo femenino.
El barrio portoalegrense de más influencia oyo es Montserrat, y gran parte de Azenha. Si quisiéramos rastrear los orígenes de la mayoría de las casas de Batuque de Uruguay y Argentina con un mapa de Porto Alegre en mano, tendríamos, como vimos recién: Azenha y Montserrat para Oyo, la Ciudad Baja para Jeje, el antiguo Beco do Poço para Cabinda; y los barrios de Menino Deus y Praia de Belas (en el comienzo del siglo llamados Areal da Baroneza) para el lado nagó.
Según la tradición fue Emília de Oyá Dirá Egùn-nitá, la mente propulsora de esta nación, cuyo fundamento y saber le permitían provocar lluvias tempestuosas con sólo hablar en dialecto oyo al oído de una paloma, soltándola luego en dirección al río Guaiba. Quien introdujera en Uruguay el culto de Batuque, fundador de casas prestigiosas como las de Armando de Oshala (Armando Ayala), Sergio de Bara (Sergio Tobías), o la del decano recientemente desaparecido Enrique de Bara (Enrique Guardia), fue el ilustre Joao do Bara (Joao Corréia Lima) Ésù Bi adscripto a este lado. No sólo por ser el primer babalorisha que viajaba constantemente a Uruguay, sino también por la cantidad de hijos que aprontó, en Porto Alegre y en Montevideo, el pai Joao es sin lugar a dudas el antepasado tribal de por lo menos el 70% de las casas de Batuque orientales, que responden a la estirpe oyo.
Llama la atención que lansã sea la orisha que precede a Oshala, y tal vez pueda resultar extraño que Oshala, considerado el patriarca yorubá, sea invocado con las mujeres, al tiempo que otros aspectos (jóvenes) del mismo orisha aparecían junto a los varones. La primera cuestión se explica recordando que lansã era la concubina real de Shangó como Alááfin de Oyo, al cesar Oba en sus funciones por engaños de alcoba y cocina. lansã, que la engañara provocando una mutilación innecesaria y la pérdida de su situación de íyalodé ( esposa principal), al ser repudiada Oba por su marido, ocupa su lugar de preeminencia como reina de Oyo y antecede pues al orisha padre. La segunda cuestión es explicada también por los mitos sagrados: por haber tratado de engañar a Naná y quitarle el dominio del reino de la muerte (que pasó a manos de lansã), vistiéndose de mujer, el más anciano de los orisha se ve obligado a vestir como una mujer para siempre, y a comer, como ellas y con ellas, animales de sexo femenino.
El barrio portoalegrense de más influencia oyo es Montserrat, y gran parte de Azenha. Si quisiéramos rastrear los orígenes de la mayoría de las casas de Batuque de Uruguay y Argentina con un mapa de Porto Alegre en mano, tendríamos, como vimos recién: Azenha y Montserrat para Oyo, la Ciudad Baja para Jeje, el antiguo Beco do Poço para Cabinda; y los barrios de Menino Deus y Praia de Belas (en el comienzo del siglo llamados Areal da Baroneza) para el lado nagó.
Según la tradición fue Emília de Oyá Dirá Egùn-nitá, la mente propulsora de esta nación, cuyo fundamento y saber le permitían provocar lluvias tempestuosas con sólo hablar en dialecto oyo al oído de una paloma, soltándola luego en dirección al río Guaiba. Quien introdujera en Uruguay el culto de Batuque, fundador de casas prestigiosas como las de Armando de Oshala (Armando Ayala), Sergio de Bara (Sergio Tobías), o la del decano recientemente desaparecido Enrique de Bara (Enrique Guardia), fue el ilustre Joao do Bara (Joao Corréia Lima) Ésù Bi adscripto a este lado. No sólo por ser el primer babalorisha que viajaba constantemente a Uruguay, sino también por la cantidad de hijos que aprontó, en Porto Alegre y en Montevideo, el pai Joao es sin lugar a dudas el antepasado tribal de por lo menos el 70% de las casas de Batuque orientales, que responden a la estirpe oyo.
5) IJESA
-El lado ijesha, comúnmente llamado jexá, es la nación de Batuque con mayor número de casas en Porto Alegre (un 72 a 80%). Los orisha se invocan en el orden siguiente:
1) BARA
2) OGÙN
3) IANSÃ
4) SHANGÒ
5) ODE
6) OTIN
7) OBA
8) OSSAYN
9) SHAPANÁ
10) OSHUM
11) IEMANJA
12) OSHALA
La reina de Ijesha es Oshum, señora de Oshogbo y devoción particular del fundador del lado, el babalorisha Cudjobá, quien pese a ser hijo de Shango con Oba, demostraba una especial debilidad por la orisha del agua dulce. El toque de ijesha es hierático, envolvente y lento, adecuado para que los orisha puedan lucir en la danza toda una gama de espectaculares coreografías. Cudjobá aprontó cientos y cientos de orisha, muriendo en 1902 en su casa de Montserrat. Su cortejo fúnebre, a pie y con la despedida de innumerables atabaques tocando en duelo hasta el cementerio de San Miguel Arcángel, todavía se recuerda en el mundo del Batuque como el paradigma de una despedida ejemplar .
2 comentarios:
me encanto su pagina y me gustaria contactasrme con usted yo soy hija de la mae de santo raquel de xango hija a su ves de la mae milka de oxum de nacion cabinda en el barrio conciliacion mi nombre es ruth y soy hija de la mae oia espero pronta respuesta gracias
Me gustaria mae si pudiera quitar la foto del Ile wa ti Oya,se que muchos copian los textos de mi pagina pero no asi las imagenes que son propiedad privada.Sin nada mas que decirle y a una espera de su respuesta faborable la saluda atentamente, Ialorisha Miriam ti Oya
Publicar un comentario